El año 2025 está siendo especialmente significativo para la protección y promoción del patrimonio cultural inmaterial en España. El Ministerio de Cultura ha impulsado nuevas declaraciones y apoyado candidaturas que evidencian la pluralidad de expresiones culturales que enriquecen el tejido social del país. Estas actuaciones se alinean con los principios de la Convención de 2003 de la UNESCO, reforzando el valor de las tradiciones vivas y la participación de las comunidades como protagonistas de su propio legado.

 La jota, símbolo de diversidad territorial, avanza hacia la UNESCO

Uno de los anuncios más destacados se realizó en la 95ª Reunión del Consejo de Patrimonio Histórico celebrada en Murcia, donde se confirmó el avance de la candidatura de la jota para ser incluida en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO. La jota, presente en múltiples variantes regionales —desde Aragón, Navarra y La Rioja, hasta Castilla-La Mancha, Murcia y Extremadura—, ha sido reconocida por su capacidad de articular identidad, memoria colectiva y creatividad popular. Su declaración internacional, prevista para 2026, sería un reconocimiento a la riqueza de las expresiones musicales y dancísticas del Estado español.

 Técnica de la piedra en seco: ampliación del reconocimiento internacional

También se ha confirmado la ampliación del ámbito territorial del reconocimiento del arte de la piedra en seco, que desde 2018 figura en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. En diciembre de 2024, se incorporaron oficialmente nuevas regiones como Madrid, Canarias y Murcia, donde esta técnica ancestral se sigue utilizando en muros agrícolas, bancales, chozos y otras construcciones rurales sin argamasa. Esta ampliación refuerza la dimensión ecológica y paisajística del patrimonio inmaterial, y su estrecha relación con los saberes locales y la sostenibilidad ambiental.

 Nuevas líneas de documentación y sensibilización

Junto a estas declaraciones, el Ministerio ha seguido desarrollando herramientas de investigación, documentación y sensibilización en torno al PCI. Entre ellas destaca la consolidación del portal Patrimonio Inmaterial de España, donde se integran fichas, vídeos, mapas y recursos educativos sobre manifestaciones reconocidas como el belenismo, las tamboradas, los patios de Córdoba, o las fiestas del fuego del solsticio de verano en los Pirineos, entre otras.

Además, se han celebrado jornadas técnicas y encuentros comunitarios destinados a impulsar la participación ciudadana en los procesos de identificación y salvaguarda, especialmente en zonas rurales y en colaboración con colectivos de mujeres, comunidades gitanas y asociaciones juveniles.

Desde Melilla Inmaterial celebramos estas iniciativas que demuestran cómo el reconocimiento institucional del patrimonio inmaterial puede contribuir al fortalecimiento de la diversidad cultural, el diálogo intergeneracional y la cohesión territorial. Animamos a seguir trabajando en la documentación y promoción de las expresiones locales de Melilla, con vistas a su futura incorporación en catálogos oficiales y estrategias de salvaguardia compartidas.